La erupción del volcán 'Laki' enfrió el clima de Europa en 3ºC durante el invierno de 1784, científicos han concluido que no provocó un calentamiento del clima aparecido en 1783, esto es relevante para predecir los efectos de futuras erupciones ...
Los negacionistas del calentamiento global de origen humano suelen argumentar que el clima cambia de forma natural, lo cual es como negar que el cáncer mate porque también se muere de viejo. Entre las causas que se suelen esgrimir, en este caso de forma inconveniente, están las erupciones volcánicas. Lo cierto es que las mayores tienen la capacidad de inyectar altas cantidades de cenizas y gases en el aire. Esto aumenta el albedo o índice de reflectividad de la atmósfera, lo que conlleva que esta refleje una mayor cantidad de radiación solar hacia el espacio. Por eso, baja la temperatura del aire, incluso a escala global. Pero, ¿estamos seguros de que siempre es así? La respuesta no es del todo clara, en parte porque en el registro existe una erupción volcánica que fue seguida de una considerable ola de calor en Europa. Se trata de la erupción del volcán Laki, ocurrida en Islandia entre 1783 y 1784, y que se caracteriza por haber causado graves alteraciones climáticas y haber matado a casi 10.000 personas. Ahora, un estudio publicado en Journal of Geophysical Research: Atmospheres, y elaborado por científicos de la Universidad de Rutgers, Estados Unidos, ha confirmado que dicha ola de calor no fue consecuencia de la erupción, sino resultado de variaciones intrínsecas del clima. Sin embargo, sí han afirmado que Laki hizo caer en casi tres grados centígrados la temperatura media de Europa durante el invierno, lo que implica, evidentemente, que algo así podría volver a ocurrir. «Para nuestra sorpresa, resulta que este cálido verano no fue causado por la erupción», ha dicho en un comunicado Alan Robock, coautor del estudio, para referirse al caluroso verano. «En vez de eso, la causa estuvo en la variabilidad natural del clima. De hecho, habría habido un verano aún más cálido de no ser por la erupción». Leer el articulo completo, clic! en el enlace: ABC.es / Ciencia |