Los datos de 'Sentinel-2A' se usaran para estudiar y mitigar el cambio climático, también servirá para ayudar en rescates o monitorizar el suelo agrícola y la deforestación ...
Hoy, martes, a las 03:51 horas de Madrid (20:00 horas de ayer, lunes, en Ciudad de México) ha partido el satélite Sentinel 2A, a bordo de un cohete Vega, desde la base de la Agencia Espacial Europea (ESA) en Kourou, en la Guayana Francesa. El artefacto es el segundo del programa Copérnico de la UE, que con 7.500 millones de euros de presupuesto es el mayor sistema civil del mundo dedicado a observar la Tierra. La separación del módulo del satélite ha tenido lugar 54 minutos después del lanzamiento. “Estos satélites van a tener un montón de aplicaciones, desde ayudar a buscar una patera que se haya perdido en el Mediterráneo hasta controlar qué tipo de árboles hay en un terreno concreto”. Miguel Ángel Molina, director de Desarrollo de Negocio y Programas en GMV, una de las empresas españolas que han participado en el desarrollo del satélite Sentinel 2A, recordaba ayer en una presentación en la base de la ESA en Villanueva de la Cañada (Madrid) cómo hace años se hicieron célebres unos olivos de cartón piedra empleados por agricultores en Italia para engañar en los controles que se hacían desde el aire con el fin de evaluar las ayudas comunitarias que les correspondían. “Eso ahora no sería posible, porque estos sensores son capaces de detectar elementos como la clorofila en las copas de los árboles”, explica. Sentinel 2A, con un peso de 1.100 kilos, es el primero de dos satélites gemelos que fotografiarán desde una altura de 786 kilómetros todas las superficies de tierra del planeta y buena parte de los océanos. Cuando a mediados del año que viene se ponga en órbita Sentinel 2B, cada cinco días sus cámaras renovarán las imágenes del planeta con una resolución de hasta diez metros. Según explica Ferrán Gascón, responsable de calidad de datos de Sentinel 2A, “aunque hay otros satélites que dan resoluciones de hasta 30 centímetros, no ofrecen una información que se renueve con tanta continuidad”. Ver el articulo completo y vídeo en: ELPAÍS.com / Ciencia |