Investigadores sugieren que los planetas extrasolares de un tamaño algo mayor que el nuestro tienen atmósferas espesas y probablemente permanezcan estériles ...
En los últimos 20 años, la búsqueda de planetas similares a la Tierra alrededor de otras estrellas se ha acelerado gracias al lanzamiento de misiones como el telescopio espacial Kepler. Utilizando estos observatorios espaciales y otros en tierra, los astrónomos han encontrado numerosos mundos que a primera vista tienen similitudes con la Tierra. Algunos de ellos se sitúan incluso en la «zona habitable» de su estrella, donde la temperatura es la correcta para que pueda existir agua líquida, lo que los convierte en los principales objetivos donde buscar vida fuera del Sistema Solar.
Ahora, un equipo de científicos del Instituto de Investigación Espacial (IWF) de la Academia de Ciencias de Austria ha analizado cómo se forman estos mundos y sugiere que muchos de ellos pueden ser mucho menos clementes para albergar vida de lo que se creía. Según los investigadores, los planetas que se forman a partir de núcleos menos masivos pueden convertirse en hábitats benignos, mientras que los objetos más grandes terminan como «minineptunos», con atmósferas espesas, y probablemente permanezcan estériles, según publican en la revista Monthly Notices de la Royal Astronomical Society. Ver el articulo completo en: ABC.es / CIENCIA