Con forma de calavera en el Sáhara y no es nieve sino el resultado de lo que pasó hace 12.000 años, tiene aproximadamente 1.000 metros de diámetro y está ubicada en el macizo de Tibesti...
| Una imagen captada por la NASA ha revelado una sorprendente mancha blanca con forma de calavera en medio del desierto del Sáhara. Aunque muchos creyeron que se trataba de una nevada, los científicos explican que este fenómeno natural tiene su origen en un antiguo proceso geológico ocurrido hace más de 12.000 años. La estructura se encuentra en el Trou au Natron, también llamado Doon Orei, una caldera volcánica situada al norte de Chad, dentro del macizo del Tibesti. Esta formación, de aproximadamente 1.000 metros de diámetro, fue originada por una gran erupción y hoy muestra, desde el espacio, una figura que recuerda a un rostro humano esculpido sobre la arena del desierto. Según los datos del Earth Observatory de la NASA, el peculiar aspecto se debe al contraste entre la sombra del borde del cráter y las zonas más claras del terreno. Desde la órbita terrestre, ese juego de luces y relieves da lugar a la apariencia de una “calavera blanca” que parece observar el cielo. El brillo característico que cubre el fondo del cráter no procede de la nieve, sino del natrón, un compuesto mineral formado por carbonato de sodio, bicarbonato sódico y sulfato sódico. Esta sustancia natural genera una capa de color blanquecino que, al reflejar la luz solar, acentúa la forma de la figura. Su textura quebradiza y brillante es responsable del efecto visual que tanto llama la atención en las imágenes. Las zonas más oscuras corresponden a conos de ceniza volcánica que se elevan varios metros sobre la superficie. Estas estructuras definen las “cuencas oculares” y la “nariz” de la calavera, mientras que la sombra del borde del cráter completa la ilusión de un rostro humano tallado por la naturaleza. Leer el articulo completo, clic! enlace: 👇 El Confidencial.com / Ciencia |








