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sábado, 8 de febrero de 2025

ESPACIO / EL PROYECTO SETI BUSCA VIDA INTELIGENTE

Hemos buscado civilizaciones en 1 millón de objetos de la Vía Láctea, quedán aún 3.319 millones. Un nuevo sistema de búsqueda de señales inteligentes ha demostrado su capacidad para procesar de manera eficiente grandes cantidades de datos en busca de civilizaciones interestelares...



No podemos evitar preguntarnos sobre la vida en otras partes del Universo. Cualquier indicio de una biofirma o incluso un evento tenue similar a una tecno-firma desvía nuestra atención de nuestros tumultuosos asuntos diarios. En 1984, nuestra búsqueda melancólica tomó forma concreta como 
SETI, la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre. Desafortunadamente, o tal vez afortunadamente, SETI no ha encontrado nada. Recientemente, los científicos utilizaron un nuevo y poderoso sistema de datos para reexaminar datos de un millón de objetos cósmicos y aún así se fueron con las manos vacías. ¿Aprendieron algo de este intento?

Este esfuerzo utilizó COSMIC, que significa Sistema de Búsqueda de Objetos Interesantes de la Matriz de Interferómetro de Línea de Base Muy Larga Comensal. Es un sistema de procesamiento de señales y algoritmos conectado al observatorio de radioastronomía Karl G. Jansky Very Large Array (VLA). Según SETI, está diseñado para "buscar señales en toda la Galaxia consistentes con nuestra comprensión de las emisiones de radio artificiales.

La astronomía moderna genera grandes volúmenes de datos y se necesitan algoritmos y procesamiento automatizado para analizarlos todos. Hasta ahora, COSMIC ha observado más de 950.000 objetos, y los resultados del esfuerzo se encuentran en un nuevo artículo. Se titula "COSMIC: The Commensal Open-Source Multimode Interferometer Cluster Search for Extraterrestrial Intelligence" y se publicará en The Astronomical Journal. La autora principal es Chenoa Tremblay de SETI.

En nuestra era tecnológica moderna, nos maravillamos no solo con nuestros ojos sino con poderosos telescopios. El Karl G. Jansky Array es uno de esos telescopios, aunque en realidad son 28 antenas de radio que funcionan juntas como un interferómetro. Cada una mide 25 metros de ancho y todas están montadas en bases móviles que se maniobran alrededor de vías férreas. Esto le da al sistema la capacidad de cambiar su radio y densidad para que pueda equilibrar su resolución angular y su sensibilidad.

Uno de los problemas que enfrenta la astronomía moderna es el diluvio de datos. No hay suficientes astrónomos o estudiantes para gestionarlo. "La idea es que estamos recibiendo cantidades crecientes de datos que deben ordenarse de nuevas maneras para encontrar información de interés científico", escriben los autores. "Desarrollar algoritmos para buscar datos de manera eficiente es una parte desafiante de la búsqueda de signos de tecnología más allá de nuestro sistema solar".

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