Se repite desde una galaxia distante, un equipo internacional de astrónomos ha detectado una nueva ráfaga rápida de radio (FRB) que desconcierta a los científicos...
Constantemente recibimos señales del Universo, desde supernovas explotando a fusiones de agujeros negros, incluidas estrellas de neutrones rotando de forma endiablada... Todo emite radiación y algunas de esas señales llegan hasta nosotros y son detectadas por los telescopios en la Tierra. Muchas de ellas conseguimos saber qué son y de dónde vienen. Pero hay algunas a las que no podemos ponerle ni nombre ni procedencia. Entre estas últimas, destacan las ráfagas rápidas de radio (FRB por sus siglas en inglés, Fast Radio Burst), las más potentes y rápidas del universo. La mayoría duran casi un suspiro, pero hay algunas que se repiten, aumentando el misterio aún más si cabe. Ahora, un equipo internacional dirigido por el astrónomo chino Li Di, de los Observatorios Astronómicos Nacionales de la Academia de Ciencias de China (NAOC), ha descubierto un nuevo FRB que no ha hecho sino acrecentar el enigma, y que estos fenómenos, de los que aún no se sabe a ciencia cierta qué los provoca, podrían tener 'infancia' y evolucionar de alguna manera, además de ser de diferentes tipos. El objeto, llamado FRB 190520, fue encontrado por el radiotelescopio esférico de apertura de quinientos metros (FAST), ubicado en China. Un estallido del objeto ocurrió el 20 de mayo de 2019, si bien no fue detectado hasta noviembre de ese año. Las observaciones de seguimiento con FAST mostraron que, a diferencia de la mayoría de FRB, parece emitir con frecuencia ráfagas de milisegundos de potentes ondas de radio. Esto ha permitido a los astrónomos realizar análisis que revelan información sobre su procedencia en el Universo y el espacio que la rodea. Esos análisis, comparados con los de otros FRB, sugieren que probablemente haya más de un mecanismo en el gran cosmos capaz de producir estos extraños estallidos. Se realizaron más observaciones utilizando el Karl G. Jansky Very Large Array de la Fundación Nacional de Ciencias, lo que reveló un conjunto fascinante de características. Las señales provenían de las afueras de una galaxia enana muy antigua, a casi 4.000 millones de años luz de distancia. Entre ráfagas de radio, la fuente parece emitir una emisión de radio más débil. Esto sugiere que las ráfagas de radio rápidas provienen de una fuente de radio persistente compacta, cuya naturaleza se desconoce. Sin embargo, esto ya se ha visto antes: otra famosa ráfaga de radio rápida de repetición, FRB 121102, que fue el primer FRB rastreado hasta su fuente, que se encuentra a las afueras de una galaxia enana muy antigua a 3 mil millones de años luz de distancia. Y también está asociado con una fuente de radio persistente compacta. Leer el articulo completo, clic! en el enlace: ABC.es / Ciencia |