Mejor que la emisión de ondas de radio, la detección en las ondas gravitacionales. Un nuevo estudio describe que son mejores metódos de transmisión de información para una civilización avanzada.
Cuando los astrónomos detectaron las primeras ondas gravitacionales, predichas desde hacía mucho tiempo, en 2015, se abrió una ventana completamente nueva al Universo. Antes de eso, la astronomía dependía de las observaciones de la luz en todas sus longitudes de onda. Una nueva investigación examina la idea y cómo podría aplicarse en el futuro. Se titula "Comunicación Gravitacional: Fundamentos, Estado del Arte y Visión Futura", y está disponible en el sitio de preimpresión arxiv.org. Los autores son Houtianfu Wang y Ozgur B. Akan. Wang y Akan pertenecen al Grupo de Internet de Todo, Departamento de Ingeniería, Universidad de Cambridge, Reino Unido. "El descubrimiento de las ondas gravitacionales ha abierto una nueva ventana de observación para la astronomía y la física, ofreciendo un enfoque único para explorar las profundidades del universo y los fenómenos astrofísicos extremos. Más allá de su impacto en la investigación astronómica, las ondas gravitacionales también han atraído una atención generalizada como un nuevo paradigma de comunicación", explican los autores. Las comunicaciones electromagnéticas tradicionales tienen inconvenientes y limitaciones definidos. Las señales se debilitan con la distancia, lo que restringe el alcance. Los efectos atmosféricos pueden interferir con las comunicaciones de radio y difuminarlas y distorsionarlas. También existen restricciones de línea de visión, y el clima solar y la actividad espacial también pueden interferir. Lo prometedor de la comunicación por ondas gravitacionales (CWC) es que podría superar estos desafíos. La CWC es robusta en entornos extremos y pierde una energía mínima a distancias extremadamente largas. También supera los problemas que afectan a la comunicación electromagnética (CEM), como la difusión, la distorsión y la reflexión. También existe la intrigante posibilidad de aprovechar las OG creadas de forma natural, lo que significa reducir la energía necesaria para crearlas. "La comunicación gravitacional, también conocida como comunicación por ondas gravitacionales, promete superar las limitaciones de la comunicación electromagnética tradicional, permitiendo una transmisión robusta a través de entornos extremos y vastas distancias", señalan los autores. Leer el articulo completo, clic! enlace: El Confidencial.com / Ciencia |