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sábado, 23 de septiembre de 2017

ASTRONÁUTICA / COLOSAL MANIOBRA PARA UNA NAVE

La Tierra, usada como una honda para volar a un asteroide ...
La nave espacial 'Osiris - Rex' sobrevoló ayer nuestro planeta a 17.000 kilómetros de altura para impulsarse y salir hacía el asteroide 'Bennu' que se encuentra a 225 millones de kilómetros.
Hace algo más de un año, la NASA lanzó desde Cabo Cañaveral (Florida, EE.UU.) la nave espacial Osiris-Rex a un primitivo asteroide llamado Bennu para recoger muestras de su superficie y traerlas de nuevo a la Tierra. Pero ese espectacular viaje de ida y vuelta, de siete años en total, no es en línea recta. Ayer viernes, la sonda realizó un cercano sobrevuelo sobre nuestro planeta para utilizar su gravedad como si fuera una honda, de forma que la impulse en su camino hacia la roca, que se encuentra a 225 millones de kilómetros. La colosal maniobra se llama asistencia gravitacional.
La nave realizó su máxima aproximación cerca de las siete de la tarde del viernes y se situó a unos 17.000 kilómetros por encima de la superficie del planeta. La maniobra sirvió para cambiar su trayectoria y ponerla en una que coincida con la del asteroide. «Se trata de una forma inteligente de mover la nave espacial hacia el plano orbital de Bennu usando la propia gravedad de la Tierra en lugar de gastar combustible», explicaba en su día Dante Lauretta, investigador principal del proyecto en la Universidad de Arizona en Tucson.
Después de viajar 965 millones de kilómetros, Osiris-Rex se acercó a la Tierra a una velocidad de casi 30.600 km por hora. A la espera de la confirmación de la NASA, que llegará el martes, de cómo se sucedieron los acontecimientos, estaba programado que la nave espacial volara sobre Australia antes de llegar a su punto más cercano a la Tierra sobre la Antártida, justo al sur del Cabo de Hornos, en Chile. La NASA pudo perder el contacto con la sonda durante casi una hora, un inconveniente previsto, y unas horas después Osiris-Rex comenzaría sus observaciones científicas de la Tierra y la Luna para calibrar sus instrumentos.

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