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sábado, 15 de julio de 2017

ASTROBIOLOGÍA / PARECEN UNOS OSOS DE GOMINOLA

El animal indestructible que verá el "Fin del Mundo" ...
'Los Tardígrados' pueden pasar 30 años sin beber ni comer, soportar temperaturas de 150ºC y sobrevivir en el espacio ...
Bajo el microscopio, estas criaturas parecen unos osos de gominola, hinchados y blanditos como una escultura de Jeff Koons. No se deje engañar por su aspecto simpático, tiene ante sí a un ser prácticamente indestructible. Cuando el Sol muera para convertirse en una gigante roja y hiervan las aguas de los océanos, algo que ocurrirá irremediablemente dentro de miles de millones de años, los pequeños tardígrados serán los únicos testigos del fin de mundo.

Estos seres diminutos de ocho patas y 0,5 mm de longitud, también llamados osos de agua por su aspecto y su curiosa forma de moverse, tienen las cualidades suficientes para, según una
 investigación publicada por las universidades de Oxford y Harvard, convertirse en la última forma de vida en la Tierra. Es más, los científicos creen que podrían estar aquí hasta 10.000 millones de años, hasta que el Sol les achicharre tras la desaparición de los océanos.

Aunque un asteroide como el que acabó con los dinosaurios hace 66 millones de años impacte de nuevo contra nuestro planeta, los tardígrados no se inmutarán. De hecho, ningún cuerpo espacial conocido que pueda entrar en nuestra órbita tiene la fuerza suficiente como para acabar con ellos. De igual forma, podrían sobrevivir a explosiones de supernovas o rayos gamma, demasiado lejanas para arrasar el planeta.


El motivo es la extraordinaria resistencia de estos organismos, que se encuentran en el agua de casi cualquier lugar, ya sean montañas, mares, selvas o regiones polares. Pueden vivir hasta 60 años y pasar la mitad de ellos sin comer ni beber. En 2016, un instituto de investigación japonés anunció que había sido capaz de 
«resucitar» con éxito a un oso de agua que había pasado 30 años congelado, todo un récord. Al parecer, estos micro-animales son capaces de entrar en estado de criptobiosis, un proceso por el que detienen o reducen todos sus procesos metabólicos hasta que las condiciones medioambientales retornan a la normalidad. Esta capacidad de deshidratación les deja «como muertos» durante años. Ese ejemplar en concreto «dormitaba» a menos de 20º bajo cero, y eso durante décadas.

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