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viernes, 24 de marzo de 2017

ASTRONOMÍA / FABRICA DE PRODUCCIÓN DE ESTRELLAS

Observan dos galaxias similares a la Vía Láctea en los comienzos del Universo, situadas a 12.000 millones de años luz de la Tierra, fabrican estrellas a una velocidad considerable y están rodeadas de unos monstruosos halos ... 
Astrónomos han logrado observar un par de galaxias similares a la nuestra, la Vía Láctea, a la lejanísima distancia de 12.000 millones de años luz de la Tierra. Estos objetos existieron en los comienzos del Universo, cuando este tenía apenas un 8% de su edad actual. Los investigadores han comprobado que estas antepasadas de las actuales espirales gigantes tienen una alta tasa de formación de estrellas y están rodeadas de superhalos de gas de hidrógeno que se extienden a muchas decenas de miles de años luz. El logro, descrito en la revista Science, ha sido posible gracias a la extrema sensibilidad del telescopio ALMA, en el desierto de Atacama, Chile.
Durante décadas, los científicos han descubierto galaxias analizando la intensa luz de cuásares aún más distantes. Cuando esta luz viaja a través de la galaxia intermedia en su camino hacia la Tierra, recoge su firma espectral única y desvela su presencia. Esta técnica, sin embargo, normalmente impide a los astrónomos ver la luz real emitida por la galaxia, «eclipsada» por la emisión mucho más brillante del cuásar de fondo.
«Imagínese una diminuta luciérnaga al lado de una linterna de alta potencia. Eso es lo que los astrónomos tienen en su contra cuando se trata de la observación de estas versiones juveniles de nuestra galaxia», explica Marcel Neeleman, de la Universidad de California, Santa Cruz, y autor principal del estudio. Pero gracias a ALMA, los astrónomos fueron finalmente capaces de observar el «resplandor» natural de las dos galaxias, una firma de carbono que mostró que el contenido de gas se extiende mucho más allá de sus discos llenos de estrellas, lo que sugiere que cada galaxia está incrustada en un monstruoso halo de gas de hidrógeno.

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